MARN propone disminuir contaminación en el Lago de Coatepeque
Los propietarios de 414 quintas recreativas, 6 hoteles, 5 restaurantes, 7 pequeños negocios de comida y 40 viviendas ubicadas en la orilla del lago de Coatepeque, en Santa Ana, recibieron hoy los lineamientos específicos para construir sistemas de tratamiento de aguas residuales en sus propiedades, con el objetivo de disminuir la contaminación que podría estar incidiendo en el cambio de color turquesa.
Las propuestas de sistemas de tratamiento se realizaron a la medida, es decir, según las necesidades o actividades de cada inmueble. Para eso se tomó como base la información recabada por personal del MARN, alcaldías de Santa Ana, El Congo, Coatepeque, Ministerio de Salud, Protección Civil y FUNDACOATEPEQUE, que en 2016 visitaron cada propiedad ubicada a la orilla del lago.
El viceministro Ángel Ibarra explicó que los sistemas se basan en mecanismos de tratamiento ecológicas y sin necesidad de equipos de bombeo, por lo que su operación y mantenimiento será sencillo y de bajo costo.
Estas soluciones deberán ser implementadas por cada propietario, con la autorización y verificación del Ministerio de Salud y las municipalidades de El Congo, Coatepeque y Santa Ana.
Sistemas de tratamiento a la medida
Para las quintas, hostales y restaurantes se recomienda la construcción de un sistema que incluya una trampa de grasa, un reactor biológico y un pozo de absorción. En caso que la infraestructura supere los 100 visitantes por día, se requerirá la presentación del Formulario Ambiental y resolución del MARN previo al inicio de cualquier obra de saneamiento.
Para las viviendas, individuales o en pequeños núcleos, con menos de 15 usuarios no será necesaria la instalación de trampas de grasa.
El diagnóstico, elaborado en 2016, señaló que en el lago se vierten aguas residuales sin tratamiento como consecuencia de la falta de planificación urbanística y la construcción de infraestructura que no cumple con la normativa ambiental.
Dichos vertidos contribuyen al incremento de los niveles de contaminación orgánica depositándose en el fondo del lago; incluyendo macronutrientes como nitrógeno y fósforos, que contribuye al incremento de cianobacterias modificando la calidad del agua, que en conjunto con materiales sedimentarios propios del lago son responsables del cambio de color del agua del lago en los últimos años.
Este problema se suma a la presión de cambio de uso de suelos en la cuenca media y alta del lago para el cultivo de granos básicos con la utilización no controlada de agroquímicos. Para la implementación de los presentes lineamientos se establece un plazo de 3 años.
MARN analiza muestras
La entrega de los lineamientos coincidió con el cambio de color turquesa en el espejo de agua. El pasado lunes 28 de agosto, un equipo técnico del MARN tomó muestras de agua a nivel superficial y a 40 metros de profundidad para determinar compuestos químicos como nitratos, fosfatos, hierro y manganeso. Esto ayudaría a verificar la disponibilidad de nutrientes acumulados en el lago y podría dar una explicación del incremento de cianobacterias.
En las muestras se evidenció la presencia de dos tipos de cianobacterias: Microcystis aeruginosa” (en concentraciones promedio de 7X104 células por mililitro) y la “Oscillatoria spp”. Ambas disminuyen la calidad del agua, por lo que se recomienda no consumir el agua del lago.
Entre otras medidas, se recomienda:
Personas sensibles de la piel, no sumergirse en el agua del lago, pues el contacto podría causar reacciones alérgicas.
El MARN hace un llamado a la población para que acaten recomendaciones brindadas por otros ministerios. Fenómenos similares ocurrieron en 1982, 1997, 2006, 2012, 2015 y 2016, este último se repite por tercer año consecutivo y se ha vuelto típico que ocurra entre los meses de agosto y septiembre.